Los MOOC representan un hype en toda regla que dicen algunos que se está extinguiendo (el hype, que no los MOOC). Algunos los tildan de revolucionarios, otros de poco más que una farsa. Lo que es innegable es que han producido todo un terremoto en la educación universitaria y, quién sabe, quizás más allá. Personalmente creo que han llegado para quedarse, aunque coincido con la necesidad de investigar más sobre su uso (tanto por parte de los ofertantes como de los alumnos), la pedagogía que se les aplica (incluyendo, por supuesto, la evaluación), su papel en el marketing, en la captación de estudiantes y en la formación continua de la población.
Un debate muy interesante que habrá que seguir con detenimiento.